Bueno, este estudio no os va a explicar del todo por qué un día sueñas que eres Batman y otro día sueñas estar en el mundo de My Little Pony (yo aún no he pasado por ahí, pero…). Lo que está claro es que los sueños desde luego son lo más variopintos posibles, yo hoy soñé que montaba una empresa y conseguía un trabajo estable con ella, ya me diréis si los sueños no son algo irreales a veces.
Jayne Gackenbach, inspirada por el interés de su hijo en los videojuegos, decidió hacer un estudio en la universidad MacEwan de Canadá, en el cual ha descubierto que los jugadores de videojuegos poseen mayor control sobre los sueños que los que no juegan. De esta forma, en vez de ver el sueño como una historia que se nos va narrando, como por ejemplo una película, los jugadores de videojuegos son más activos dentro de sus sueños, de esta forma los jugadores suelen luchar en vez de correr cuando son perseguidos y hacen decisiones dentro de los sueños de forma que pueden cambiar el curso de la historia del sueño (y su experiencia).
Además, si esto no fuera poco, Eva Murzyn de la universidad de Derby, descubrió que los jugador del World of Warcraft suelen incorporar la interfaz del juego en sus sueños… escalofriante, ¿verdad?